miércoles, 18 de septiembre de 2013

Baño de Sales

 
Si me sumerjo, es porque no quiero oír ni el aliento de las burbujas. 
Si me sumerjo es para evitar la esponja de sensaciones ásperas, las que van dejando el aroma de las decepciones en la piel. 
Si me sumerjo es para no ver el techo de la vida y se desdibuje en el agua que me tapa el ambiente que rodea las horas. 
Si me sumerjo es para aliviar el calor de los días, la urticaria de la civilización incoherente. 
Si me sumerjo es para que la bala viaje más lenta y pueda hacer un último repaso de mi historia.